JOSÉ ANTONIO RAMÍREZ
José Antonio Ramírez
Ganador del 18é Premi Tardor de Poesia, con el trabajo Ropa tendida.
Ropa tendida
Tú renunciaste al patio, esa galera
comunal que vigilan
los gatos en su oscura
complicidad de cómitres divinos.
Lo tuyo era subir
de noche a por la ropa a la azotea
y jugar a perderte
conmigo entre las sábanas.
Virgen tú entre tus prendas,
desnuda me burlabas,
esquiva te reías
de la torpeza de mis manos. Hasta
que te rendías, pipa
de melón ya tu boca, sobre el blanco
montón de la colada.
La espuma deja siempre
tras de sí el rastro leve
de la huída y ampara
también las formas puras que sostuvo
un instante en su ola.
¡Oh luna de algodón, jabón de mar
con el que lavo aún
mis pecados más viejos,
la ropa de los sueños,
la memoria que sigo
tendiendo en tu azotea!
La planchadora
Como quien mima un cuerpo
que nunca tuvo entre sus manos,
Carmencita le plancha sus camisas.
¿Qué puede un hombre dar
que más le pertenezca?
¿Qué más fina entretela que ese hilo
que toca el corazón?
Amor es ensuciarse
y amor es abrochar una camisa
con la ternura huérfana
que consiente el botón.
Queda el amor, a veces,
perdido en su descuido,
vivo aún en la rama
que en su fuga rozase.
Actualizado (Lunes, 02 de Mayo de 2016 12:12)